Vivir en una ciudad grande hace que puedas contemplar esas especies raras que normalmente se ocultan durante el día laborable e invierno y florecen en festivos y primaveras.
Esas máquinas que son mayormente ilógicas para el uso diario, piezas carísimas, altos consumos, exclusividad, antigüedades, rarezas, pequeñas joyitas o simplemente modelos muy poco vistos o personalizados de manera curiosa. Todo eso que nos gusta ver pero normalmente no contamos con el poder adquisitivo suficiente para mantenerlo. Vamos a ir mostrando lo que nos encontramos por ahí.

Benelli 500 Quattro disimulando. Tricilíndrica y oxidada

Suzuki Katana. Candidata a una de las más feas de la historia. En “persona” gana mucho.

Preciosa Royal Enfield 500 monoplaza

BMW R1100R esos colores le quedan genial.

Ducati Diavel en modo viajero.

Triumph Bonneville humillada.

Honda CB 750 Nighthawk. No creo que hayas visto muchas en España.

Una chopper a medida de exposición. Es curioso porque la vi dos veces: aparcada y cuando se la llevó la grúa.

Harley Davidson Fat Boy con collage en el depósito y mucho mate.

Yamaha SR personalizada por C. R. O. Motorcycles.

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