El truco está en salir de casa con las manos calientes y subirte a la moto de tal manera que los guantes de invierno trabajen el aislamiento “tan solo” conservando el calor…

O eso o llevar guantes calefactables!!

No, no es cierto tampoco eso. No son la panacea, si te subes a la moto con las manos frías y esperas que los guantes te las calienten esto es lo que ocurrirá:

• Que lo logren a costa de mantener el guante al máximo de potencia durante mucho tiempo. Sobre todo si circulamos fuera de ciudad y recibimos viento directo frío. En ciudad aún todavía será más fácil, lograremos calentarnos y podremos bajar el nivel de potencia pronto para sólo mantener nuestro calor. Fuera de ciudad, recibiendo viento directo frío en las manos vamos a tardar mucho más en recuperar calor, (pero mucho más), si es que lo logramos y a costa de consumir mucha batería.
• Que no lo logren y sólo gastes batería además de pasar frío. Recuerda que no son un hornillo, tienen un tono de calor que en los dedos se nota pero poco. Si están recibiendo frío tienen que compensarlo y además subir tu temperatura, que no es poco.

Otros guantes

No es mi primera experiencia con guantes calefactables. Ya probé un par de la marca Savior, pero la experiencia no fue muy positiva y no es que fueran malos, por poco más de cien euros tampoco esperaba estar como en una cabaña con las manos frente a la chimenea.

La costura del dedo pulgar quedaba muy tirante y de cara a agarrar el puño de la moto hacía que me resultara algo incómodo. No un drama, pero no me gustaba (eh, 110€ son 110€).

Lo que hizo que al final devolviera el producto (gracias a la filosofía de Amazon) fue que el calor que recibía era tan poco que sólo notaba el guante algo tibio. Como guante para senderismo o similar resultaría correcto y suficiente pero en moto recibimos viento muy fuerte, muy directo y muy frío, así que necesitamos mucha chicha.

Seventy Degrees SD-T39

Así que me puse a investigar un poco sobre guantes calefactables, la ropa calefactable va calando en los motoristas poco a poco. A mi me parece un avance magnífico, desde los puños calefactables a los chalecos, plantillas, guantes, etc. No sólo conservar el calor corporal sino el hecho de tener una fuente emitiendo calor es algo impagable en la moto. Y si no que se lo digan a Fran, que se pasa todo el invierno vistiendo de cuero gracias a su chaleco calefactable.

Bueno, impagable pero por éso valen pasta. Un mínimo de unos 100€ que pueden resultar una pérdida de dinero si no hacen su trabajo y un máximo que no quiero averiguar. Así que toca investigar un poco.

Y llegué a los Seventy Degrees. Una marca poco conocida (al menos en España) pero que trabaja con guantes de todo tipo. Aquí te dejo su web con toda la información, fotos y especificaciones técnicas de los Seventy Degrees SD-T39.

Estaba abierto a cualquier marca, pero acabé definiendo estos guantes como de una buena relación calidad-precio, algo de lo que soy muy fan 🙂

Guantes calefactables confeccionados en tejido Softshell con la palma en piel de vaca con refuerzos. Incorporan una batería autónoma recargable con 3 posiciones de calor. El acolchado térmico con aislamiento Prilation y su membrana impermeable y transpirable Wintertex garantizan un perfecto confort los días más fríos, y su protector de nudillos integrado proporciona una excelente protección.

Web Motocard

De tiendas

Si te digo la verdad, en Motocard no me atendieron bien. Fui como cliente que necesita asesoramiento, todos somos muy listos, muy moteros y tenemos internet, pero en lo que se refiere a guantes calefactables las opiniones valen mucho y no hay una opción segura más que gastarse mucha pasta. Algo que, a decir verdad, tampoco certifica que a ti te vaya a ir bien y sobre todo, que no has tirado dinero a la basura porque para tu uso te habrían servido otros mucho más baratos.

Así que tras el asesoramiento limitado a “hombre, calentar, calentar, calientan más los guantes 270€ que los de 190€“, cogí el casco y me llevé mis dudas a otra tienda. – Ojo, que no tengo nada contra Motocard, volveré cuando lo vuelva a necesitar, solo te cuento lo que pasó.

En mi corta y no muy fructuosa investigación había dado con un vídeo de la tienda Carenados GP en el que hablaban un poco de estos guantes y vi que, a diferencia de todas las fotos de promoción que se repetían en todas las webs, en el vídeo se veía que los conectores de los guantes a sus baterías y cargadores eran USB y no los clásicos PIN que suelen llevar. Además, hacían el comentario de que eran mucho más ventajosos al tener la versatilidad de poder cargarse a través de una batería externa.

Ya había estado en Carenados GP hacía tiempo, de hecho allí me había comprado el casco Scorpion ADX-1. Recuerdo que tampoco fueron los más simpáticos del mundo, pero tenían buenos precios y los productos que quiero, así que suficiente; fui para allá, crucé la ciudad de norte a sur y llegué a tiempo.

Compra y precio

Allí me enseñaron distintos guantes, no me aclararon mucho las dudas en forma de información práctica, yo estaba muy perdido, quería alguna seguridad. Hablamos de bastante pasta para unos guantes, sobre todo porque yo ya tenía unos de invierno. Los Garibaldi de 250 € serán cojonudos, pero me da algo de corte para lo que yo considero un lujo (otros años he tirado de manoplas de mensaka y puños calefactables, manoplas impermeables de tres dedos sobre guantes de invierno, etc.). Así en la tienda que se portaron bastante bien al no echarme a tomar por culo de tanto pensar y probar las diferencias de uno y otro. Finalmente me los llevé por mucho menos de lo que se decía en los artículos de promoción y algo más importante: por una cantidad que me parecía justa. De 170€ a 140€: guapamente.

A ese nivel de dinero podría haberme gastado algo más si tuviera la seguridad de que valía la diferencia con otro guante. Me los llevé sin garantías de que no fueran a ser como aquellos de Amazon que devolví de los que te hablaba al principio, me la jugué.

Además, me gustaba mucho la posibilidad de poder incluso usar los guantes conectándolos vía USB directamente a la moto, algo que no supieron aclararme en la tienda, ni siquiera que sea factible cargarlos a través de una batería externa como decían en el vídeo. Físicamente son macho y hembra, pero está el tema del voltaje y que normalmente el fabricante sólo aconseja cargar sus productos con el cargador que se suministra, no con cualquier invento.

Y nop, no busques respuestas a este respecto aquí porque todavía no me la he jugado, aún no he tenido necesidad de intentarlo.

Complementando

8 de la mañana, 9 grados, eso no es frío, es fresco, no necesito los calefactables, pero me los llevo igualmente. Nunca se sabe y el resto del año no los voy a usar, así que hago uso del “porsiaca”.

No los llevo encendidos, el guante es grueso y no es necesario.

Desoyendo mis propios consejos, monté con las manos frías. No es un drama pero cuando cogí carretera decidí encender los guantes y los puse al nivel mínimo – color verde. Noté enseguida una sensación muy agradable de calorcito en unas manos que aún seguían frías (ya no iban a recuperar el calor hasta que llegara a mi destino, así que valía la pena intentarlo).

Así que oye, tanto para que el frío no vaya a más como para simplemente darme el gusto de ir más cómodo en mis desplazamientos diarios ya que tengo la opción, es un buen uso y recomiendo estos guantes.

Ya tienes aquí una opinión, espero que te haya ayudado algo para decidir en tu compra.